


Ciertas gentes del Valle del Gran Rey me recordaron a la Ibiza de los setenta, al parecer también fue un reducto de vida hippie, gentes pacíficas que buscaban una alternativa de vida lejos del bullicio de las ciudades y del sistema de vida llamado capitalista, artistas de todo ámbito, escritores, pintores, músicos, esos que en Ibiza llamábamos “cariñosamente” peluts.
Parece un lugar muy tranquilo, espero verlo pronto. Antes que les de por hacer una autopista.
ResponderEliminarBikos