16 de octubre de 2007

PUNICA GRANATUM







La despensa de la naturaleza siempre está abierta, llegas, te sirves, y sigues volando. Ni siquiera tienes que lavar los platos.

1 comentario:

  1. Anónimo8:01 p. m.

    ¡seguro que has sido tú, travieso, quien se las ha comido!

    ¡eres el único humano capaz de dejar su redondez intacta!


    jejejej
    Un abracito lindo, amorcito

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