1 de agosto de 2007

PUESTA DE SOLES







Tres soles tenía a mi lado sentadas al borde del mar
contemplando la belleza del quehacer cotidiano de otro sol,
esconderse lentamente tras la línea del horizonte para repartir su luz en otros lugares, sencilla rutina para que la vida siga.

1 comentario:

Anónimo dijo...

En uno de sus cuentos, Asimov relataba la historia de un planeta que no conocía la noche, tenía tres soles.

Cuidado con los eclipses.

Beni