FELIZ AÑO VENIDERO

Os dejo unos días, hasta enero, dos muestras de los veinte trípticos expuestos en La Torre y que permanecerán los fines de semana de diciembre y tal vez enero.

Yo me voy huyendo de la navidad a cambiar de aires y a buscar imágenes y experiencias de otros lugares. Que acabeis el viejo y empeceis el nuevo año lo mejor posible.

Hasta la vuelta.

EXPOSICIÓN NATURAL

El sábado, desde La Torre, lugar donde espongo mis fotos junto a pinturas y poemas de Jóse y Miguel, no hacía falta mirar los cuadros colgados de la pared, la belleza estaba afuera, en la terraza, mirando al horizonte, el cielo reunía sin esfuerzo la fotografía, la pintura y la poesía.

DUNAS DE URALITA

Los tejados de uralita ya no están de moda, pero a las lagartijas les encanta pasear entre las dunas de líquen.

CAL Y PIEDRA

La Isla Blanca, la llamaban. Ya no. Cada vez hay menos casas blancas, se ensucian mucho y se ven desde lejos, y no está la cosa como para dejarse ver mucho.
La cal ya no se usa, los modernos materiales la han desbancado. Los ocres, tierras, cremas, la han sustituido, y así si llueve barro no desentonan y además no hay que blanquear cada año.
Nos queda la piedra, dura y cabezota se resiste al bloque. Bendita sea.

CANTERA

Cerca de San Antonio, aunque dentro del municipio de San José, restos de una cantera de marés descansan al borde del mar. Antaño la costa era tierra baldía, inservible, menospreciada, y no importaba demasiado cortarla en pedacitos, además era más barata que importar piedra de otros lugares y ayudó a construir la torre de defensa de la Iglesia de San Antonio.
Hoy la zona costera es nuestra riqueza y debería ser intocable, o por lo menos bien cuidada y defendida.

ESCALERA AL MAR

He encontrado la piscina más grande del mundo. De repente, paseando al borde del mar por entre rocas castigadas por los oleajes, alguien a enclavado una escalerilla para entrar en el mar. Me he enterado que cerca vive una persona con la edad suficiente como para tener dificultades para caminar entre las rocas mojadas y meterse en el mar, por eso ideó la escalerilla.

Sólo alguien enamorado del mar es capaz de tamaña solución, todo tiene arreglo en esta vida, sólo hay que proponérselo de verdad.

CARACOL EN LA CHUMBERA

El caracol es un todoterreno y no está en peligro de extinción, de momento, pero la chumbera, aún siendo una sufridora y luchadora, el poco aprecio de la mano humano la va sacrificando y arrinconando cada vez más.

CONSTRUIR O DESTRUIR

Nos la están metiendo doblada. La Filosofía del ladrillo crea adeptos a increíble velocidad. La gente necesita un techo, es indiscutible. Pero no se construyen techos pensando en esa gente. Se construye porque es un gran negocio, tanto que las Constructoras son ya el Nuevo Poder.
No se respeta nada. El dinero lo corrompe todo. El Poder Político está a sus órdenes, entre otras cosas porque la mayoría de veces son las mismas personas las que tienen las dos cosas, el Poder y el Dinero. Y si no, no importa, el Cargo es sobornable.
Escudándose en que se consideran el Motor del Progreso, están destruyendo los lugares más privilegiados de la naturaleza, la costa virgen, los bosques, sin importarles el equilibrio natural, sustituyendo tierra por asfalto, torrentes por cañerías, la luz de las estrellas por la contaminación lumínica.

POESÍA DESHOJADA

Convencí hace unos meses a Jóse, mi hermano pequeño de edad y grande de alma, y a Miguel, también bastante menor en años pero grande en corazón, a que acompañaran a mis hojas retratadas con su alma y corazón, uno con su pincel, otro con su pluma, y ahora vamos a enseñar juntos nuestra creación.
El día ocho de diciembre exponemos una serie de trípticos (Fotografía-Acrílico-Poesía) en el restaurante La Torre que dirige mi amigo Pedro.
Respecto a las obras, somos tres “pardillos” dentro del mundo del arte, pero somos atrevidos. Además, alguien que sabía mucho de esto dijo más o menos: “El arte malo es sustancialmente mejor que el bueno porque documenta el fracaso humano”. Y me gusta. Hay demasiada belleza por descubrir para rendirse.

UN AÑO DE BLOG

Un añito de bloggero. No me lo esperaba teniendo en cuenta mi yu-yu informático. Pero estoy agradecido: A google. A Jorge que me convenció. A los que me leen y miran. A mi cámara de fotos. A mi boli. A mis zapatillas. A mi isla que me nutre de contenido. Al mundo por dar vueltas. A la vida por estar viva. Y a mí. Os quiero.

COLONIA DE SACRAMENTO (URUGUAY)

Es para mí la más bonita ciudad de Uruguay, sus empedradas calles, sus antiguas casas, su paseo al borde del Río de la Plata con una puesta de sol tan bonita como la que más, sus románticos restaurantes, sus pequeños hotelitos, su amable gente y una historia que le ha valido ser Patrimonio de la Humanidad.

QUERER O AMAR

Una vez oí decir a un jardinero: “Si quieres esta flor, córtala, llévatela, disfrútala unos días, pero si la amas, déjala crecer, disfrútala como es”. Bueno, no era un simple jardinero, era un viejo monje jardinero.
Es como el amor entre seres humanos, querer es poseer, exclusivizar, esclavizar, ceder, aguantar, compartir, repartir,…pero amar es otra cosa, es no dar nada y darlo todo, no esperar nada y recibir todo.
Si quieres a alguien cógelo, si amas déjalo ser.
Qué fácil es confundir querer con amar. Desde el lenguaje a los hechos reales, se confunde porque se funde. Se mezcla. Se alea. Se hace una pasta.
El te quiero lleva implícito compromiso: yo te quiero para mí. El te amo significa sólo eso: te amo sobre todas las cosas. Si estás cerca me vuelvo loco y si estás lejos también. Si te toco me derrito y si te sueño también. No sé en el día que vivo, ni me importa. No sé de donde eres. No sé como te llamas. No busco piso. No compro ajuar. Únicamente te amo.
Cuando nos queramos hablaremos del futuro. Tal vez nos sigamos amando.

ABEJORRO

¡Qué mania tienen los borinots en meterse en agujeros dulces y carnosos! ¡Qué envidia!

CICLO DE VIDA

El polen hace el amor en el bosque, nacen nuevos pinos, caen las piñas secas.

MONTEVIDEO(URUGUAY)

Había quedado con Luis en vernos en Montevideo y pasar juntos la Navidad, estuvimos unos días cerca de la playa en su casita de madera. Está siendo un verano anormal, el tiempo no es muy caluroso y llueve a menudo.
Me ha gustado la ciudad, sobre todo la parte antigua y sus interminables paseos al borde del Río de la Plata en su inmensa desembocadura.
Aquí se cogen kilos rápidamente, sólo hay que meterse en el Mercado Central y sentarse en alguna de las churrasquerías, son un espectáculo.

LAGARTIJAS

Este año el clima benigno está permitiendo a mis queridas sargantanas alargar su estancia al sol y mantener brillante su color de piel, pero poco a poco empiezan a esconderse y preparar su guarida para el corto invierno de Ibiza.

MADRUGAR

Siendo todo tan relativo llamaremos madrugar a cualquier hora que el reloj marque antes de las ocho de la mañana. Yo nunca he madrugado en periodo de trabajo, en vacaciones sí.
En mi época de currante oficinista me bastaba con despertar a las ocho y media para estar sentado en mi silla a las nueve. Un privilegio.
Cuando viajo por otros lugares, la cama lo justo, para descansar ya tengo mi casa.
El asunto va de levantarse temprano cuando no tienes obligaciones ineludibles que cumplir, o sea cuando no tienes lo que llaman trabajo, aunque no pares de hacer cosas.
El otro día hablaba de planificar, pues bien, las mañanas desprogramadas no me gustan. Por la mañana la casa no me habla, no soy amo de casa vocacional. Lo que si me gusta es mirar el cielo recién levantado y cambiar de planes según de donde venga el viento.
Mi vida de free-lance de los últimos años me permite llevar varios proyectos a la vez y marcarme mis propios plazos de ejecución.
Ahora me absorbe la fotografía, en otros tiempos la pintura, pero siempre desglosando con pluma reflexiones en papel. Es una buena mezcla aunque a veces complicada de coordinar cuando tratas de hacerla rentable para vivir. Todo lo que se acerca al arte necesita dedicación exclusiva y bastante locura, y eso no es compatible con una cuenta bancaria tirando a rojo.
Me estoy desviando de los madrugones, quería decir que despertarse por la mañana sin encarar el día con el ánimo necesario para afrontar lo que te echen, es jodido. Yo, por eso, estoy aprendiendo a apreciar y disfrutar de las cosas más sencillas de la vida, levantarse sonriendo, desayunar sin prisas, pasear un ratito, y por la tarde…ya veremos.
Pero eso es un privilegio único de los parados oficiales.

BELLOTAS

Las encinas (Quercus ilex), alzinas o carrasca para los nativos, crecen en nuestros bosques ibicencos sin alcanzar el tamaño de árbol, los pinos les comen la luz y el agua y les permiten vivir como simples arbustos, pero aún así alegran el paisaje rompiendo la monotonía luciendo con orgullo sus frutos, esas preciosas bellotas.

Fina me corrige: esta especie es Quercus coccifera y sus frutos se llaman aglans.

UNICORNIO

Los animales se transforman y mimetizan para sobrevivir a sus depredadores, pero las plantas con sus flores con formas tan llamativas y provocativas, ¿No tendrán miedo a acabar rellenando un jarrón para deleitar la vista a los humanos?

BAHÍA DE SAN ANTONIO (1950-2005)

Nada perdura en el tiempo, un dique mayor, un paseo bordeando la bahía, una estación marítima, muchos veleros, nada de esto se imaginaban en 1950 viendo la vida en blanco y negro. La foto esta sacada desde el mismo lugar.

PORTO ALEGRE (BRASIL)

Ha sido una estancia corta, estoy de paso, pero me ha gustado Porto Alegre, capital del estado Rio Grande do Sul. Se halla al borde del Río Guaiba que en realidad es un lago en el que desembocan otros cuatro ríos que forman una inmensa laguna, Lagoa dos Patos, separada del Atlántico por una franja de tierra, algo así como nuestra Manga del Mar Menor pero a lo grande.Es una ciudad industrial y agrícola pero muy volcada al arte, tanto en la calle como en galerías y museos se respira sensibilidad y preocupación por la cultura

PAYÉS ENTRAÑABLE

El pasado sábado, mientras esperaba a Manu para ir a comer Sofrit payés a Cala Conta, me colé en un pequeño huerto para fotografiar a mis queridas hojas rojas de un caqui.
Cuando apuntaba con mi arma apareció un viejecito payés y yo, separando el objetivo de mi ojo, le pedí permiso para seguir apuntando a su árbol. Se acercó a mi con las manos en posición de rezar hablando bajito, “perdóneme usted que le moleste”, carai!-le dije- soy yo el que está en su casa, perdóneme usted por haber entrado. El, como si no me oyera, siguió a lo suyo: “Admiro mucho a las personas que hacen fotos a los árboles, perdóneme si le he molestado”. Y dale!, soy yo el que ha estorbado su paz, “gracias por visitarme”, siguió sin escucharme, “pase a mi casa que le daré una botella de vino payés hecho por mí”, ¡encima! Pasé a verle a un pequeño almacén donde estaba rellenando las botellas, ¡dos!, y casi sollozando me seguía agradeciendo la visita, me ofreció que me llevara lo que quisiera de su huerto, me acompañó hasta la carretera y nos despedimos como si nos conociéramos de toda la vida.
Me encanta hablar payés con la gente mayor del campo. ¡Qué bondad y sencillez!

PASEO DOMINICAL

Ese paseo del domingo dió para mucho, después de los caracoles de Caló des Pou camino de Caló d´en Serra a través de un bosquecillo de pinos bajos, savinas, brezos, aparecían libélulas y mariposas vestidas de fiesta.

CALÓ DES POU

En la ruta del otro día por los alrededores de Portinatx bajamos a es Caló des Pou siguiendo una torrentera ahora seca y en esa pequeña cala de cantos rodados fotografié esas curiosas colonias de caracolillos y alguna que otra peonza y cornet con su ermitaño.