Nos sentamos al borde del mar en las casetas-varadero riéndonos pensando en el camino de vuelta. Repusimos fuerzas con un bocata preparado para la ocasión, de sardinas. Y ahora, transcurridos los días, creo que no fué tan duro y ya pienso en volver.
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5 comentarios:
nunca he estado creo. Lo dejare para el invierno, suelo hacer rutas, aunque si es tan pesada como dejas entrever...
Un encanto de calita con esta austeridad de los "escars" y sus accesos.Estas pequeñas construcciones parecen nacidas de la roca de tan integrados que están en el entorno. Una verdadera maravilla.
Un saludo Erna
Hola Juan, soy una asidua de tu blog desde que no hace mucho lo descubrí (mientras buscaba infomación de Es Vedrá), y una enamorada de tu isla, la isla de las sargantanas, desde hace ya tiempo. Dentro de unos días iré para allá, en la primera quincena de Julio. ¿Tienes en Dalt Vila alguna exposición de esas fotos tuyas tan fantásticas? Sería magnífico verlas "en directo". Ya me contarás. Saludos desde Pamplona.
Hola Mamen, desde el blog pincha en RECORRIDO A PIE POR LA ISLA y verás en mi web muchas fotos de Dalt Vila como Patrimonio de la Humanidad, un saludo Juan
Espero que algún día me enseñes el camino, desde arriba parece imposible bajar.
Bikos.
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