25 de julio de 2008

PAYÉS AUTÉNTICO




El domingo hice una visita a mi amigo Toni, padre de mi amigo Kiko, un auténtico payés que supo ceder a tiempo el testigo del negocio del bar a su hijo y subirse a la montaña a la casa payesa a lidiar diariamente con cerdos, cabras, ovejas, gallinas, pavos,...Dura vida a nivel físico pero enriquecedora de mente y corazón si lo haces con cariño y placer.

2 comentarios:

Erna Ehlert dijo...

Que bonito!!!

Me gustan los payeses y sus animales. Si, es vida dura pero es vida.
Como no saben de días de descanso los animales te necesitan a diario.
Preciosa foto la de la gallina con sus poluelos.

Anónimo dijo...

De algún modo es algo similar a lo que estás haciendo tú, amorcito.

Te alejas de los grandes actos cotidianos de la vida social buscando tus recodos en consonancia con la naturaleza y quizá cada vez te estés dando más cuenta de que no necesitas a nadie porque jamás has estado solo. La Vida que descubre tu objetivo es testimonio de tu despertar pleno hacia la conexión con todo. Me alegro tanto de presentir tus pasos ermitaños...el caminar sabio de los años de templanza