El frio no llega y las libélulas se resisten a hibernar y continúan con su largo verano. Los animales y mi rodilla son el mejor termómetro para conocer los cambios climáticos, pero últimamente las predicciones fallan, las estaciones, al igual que el sistema financiero, también tendrán que revisarse.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario