BANCALES EN MORNA

Subiendo por el torrente de Morna entre los pinares del Puig Gros llegamos a un valle donde se encuentran montones de bancales de siembra, feixes en payés. Por su belleza y por lo que han representado en la vida payesa deberían declararse de Interés Paisajístico y Cultural.

SABINA NEGRA

Los frutos de la savina (Juniperus phoenicea), llamados gàlbuls o vulgarmente savinons, no son comestibles para nosotros pero algunos pájaros dan buena cuenta de ellos.

HABITACIÓN CON VISTAS

¡Qué privilegio ver Es Vedrá desde la ventana de la casa!, y subir las escaleras al tejado para tocar su cima con las manos.

SOMBRAS CHINESCAS

La chumbera es pura anarquía, crece donde quiere, cuando quiere y como quiere. Se divierte creando sombras y contraluces.

VIDA DE PAYÉS XXXIII

Muchas de estas monadas de cabritets estarán sirviendo de comida en estos días de fiesta. Ley de vida... o ley de muerte. Pero Toni, mi payés preferido, sigue a sus setenta y muchos años criando su pequeño rebaño de cabras y ovejas que dice le cuestan más de lo que recibe, pero recibe a cambio cosas que el dinero no puede dar.

FRACTAL DE CACTUS

Los diseñadores de la naturaleza son inigualables.

COLLEJA

Las flores hermafroditas de los colitxos o escalfidors (Silene vulgaris), es la única parte no comestible de esta planta autóctona mediterránea, sus hojas y tallos se pueden consumir incluso en crudo.

OLIVOS DE PIEDRA

Se van abriendo camino entre las paredes de piedra hasta formar parte de ella o irremisiblemente tumbarla.

FRUTOS DE ADELFA

En esta época los frutos del baladre (Nerium oleander) estan maduros, pronto se irán abriendo poco a poco para esparcir sus semillas.

FONT DES VERGER

El valle de Morna es una preciosa zona rica en agua donde conviven prácticamente todas las especies de árboles de nuestra isla, pinos, algarrobos, higueras, almendros, y sobre todo muchos antiquísimos olivos. Subiendo a lo alto del valle encontramos una de las fuentes que manan hacia el valle, Sa Font des Verger de Dalt.

ES VEDRÁ PARA ERNA

Por un sendero bajo las paredes de piedra de Ses Roques Altes disfrutamos de una visión diferente de Es Vedrá y Es Vedranell. Se lo dedico a mi amiga mallorquina Erna que sabe bien que se siente contemplando estos islotes.

ESTEPA

La estepa (Cistus Albidus) resiste seca los rigores del invierno sin querer morirse del todo, en primavera nos regalará los colores de sus flores.

CASAS EN EL BOSQUE

Escondidas en los bosques ibicencos hay casas aparentemente aisladas pero no es así, una red de caminos y senderos hacen que en poco rato llegen a algún pueblo cercano.

HOJAS ILUMINADAS

Con la lluvia todo empieza a brillar.

BEBEDERO DE PIEDRA

Algunos payeses guardan reliquias a la intemperie, supongo que a la espera de algún día exhibirlas en el jardín de su casa. Me sorprendió el gran tamaño de esa pica (no sé como la llaman en payés) en la que almacenaban agua generalmente para dar de beber a los animales, pero en ésta sólo tienen acceso los caballos. La foto en blanco y negro es de F. Catalá i Roca.

Me contestan en los comentarios que en ibicenco se llama abeurador (traducción literal de abrevadero).

ORQUÍDEAS DE INVIERNO

Ya empiezan a nacer las orquídeas del invierno ibicenco, sobre todo la Ophrys Dyris y la Ophrys Fusca.

LA TIERRA AGONIZA

Aprovecho estos días de la Cumbre para poner mi granito de arena en el desierto de las voluntades políticas. Robo una imagen de la red y un magnífico dibujo del gran Eneko para no sé muy bien qué, las grandes potencias con sus grandes empresas y sus grandes fortunas no parecen estar por la labor de intentar hacer un mundo más vivible, siempre han pensado que la naturaleza se basta para regenerarse a sí misma y seguir regalándoles sus considerados inagotables recursos, pero parece que va en serio que esto se acaba, o nos ponemos las pilas, perdón, o reciclamos las pilas, es un decir, o nos reciclamos nosotros primero y después mil cosas más, o la tierra ya agonizante entrará en coma profundo.