18 de junio de 2011

CAN TIXEDÓ DE BUSCASTELL


Bauzá les construyó la casa, Dani prepara tapas de las que siempre sobran migajas, y el lugar es un entorno de paz en el que los gorriones han decidido vivir.

1 comentario:

Erna Ehlert dijo...

Que graciosos, Juan.

Son unos espapilados los gorriones.

Un abrazo