

La otra mañana, tempranito, subí con Lina hasta Es Castellar, el bosque ya olía húmedo por una pequeña lluvia, y desde arriba se veía indefensa la mayor de Ses Margalides, y abajo los varaderos de Ses Balandres que decidimos que serían nuestra próxima visita.
1 comentario:
ahora lo veo y no se si sabré bajar hasta alli abajo mañana...
Que tengo vertigoooo!
Publicar un comentario