Éste pasado domingo, caminando por es camí des Colls, escondido en el bosque, cerca de es torrent des Cirer, me topé con un Forn de Calç en el que en su interior había un carro de baranes totalmente destrozado con restos de uralita rota encima que debía servir para tapar el horno.
Los carros de barana son un patrimonio cultural de los ibicencos y da mucha pena como algunas personas no le dan el valor que debería tener y los dejan morir abandonados.
He recuperado algunas fotos que he ido tomando desde hace tiempo y demuestran el poco aprecio que algunos les dan a estos carruajes que durante siglos han sido el medio de locomoción de muchos ibicencos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario