Intento mostraros cada día las maravillas de esta isla, pero hoy toca una imagen triste. Es inaudito que pueda desaparecer una montaña y nadie pueda impedirlo. Y para que todos se enteren lo mejor es hacerlo a la vista de todos, frente al aeropuerto, que se enteren estos turistos de quien manda, a los poderosos no hay leyes que les asusten, si la ley no es buena la cambian, pero las montañas les hacen mucha falta para seguir construyendo y todavia les quedan muchas. El espírutu de la tierra y de los árboles vive encerrado en cemento y asfalto.
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