Aprovecho estos días de la Cumbre para poner mi granito de arena en el desierto de las voluntades políticas. Robo una imagen de la red y un magnífico dibujo del gran Eneko para no sé muy bien qué, las grandes potencias con sus grandes empresas y sus grandes fortunas no parecen estar por la labor de intentar hacer un mundo más vivible, siempre han pensado que la naturaleza se basta para regenerarse a sí misma y seguir regalándoles sus considerados inagotables recursos, pero parece que va en serio que esto se acaba, o nos ponemos las pilas, perdón, o reciclamos las pilas, es un decir, o nos reciclamos nosotros primero y después mil cosas más, o la tierra ya agonizante entrará en coma profundo.
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3 comentarios:
Completamente de acuerdo, lo malo de las cumbres es que tan solo quedan en papel mojado, eso es todo.
Si sirve un granito más, ahí va el mio.
Bona nit
Esto es una nueva religión, Juan. No tiene nada que ver con la ciencia del clima. Lamento disentir de tu posición. Un día hablamos del tema com calma. Una cosa es respetemos más, contaminemos menos, seamos más conscientes del impacto de nuestra vida sobre la de los demás. La tierra es mayorcita y no necesita sacerdocios. El Co2 es un gas de vida. Que la fe no te nuble nunca la posibilidad de la duda. Ella es la gran motora de nuestros avances.
Precisamente son las grandes fortunas y las grandes empresas las que se están sirviendo de esa nueva creencia, para hacer el agosto.
Un abrazo, Josetxo.
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