El camino de bajada es algo pesado por estar deteriorado por las lluvias y además por la ayuda inestimable de motos y todo-terrenos varios, pero una vez abajo disfruta sin pensar en el regreso. Las rocas caídas desde los acantilados han hecho desaparecer todo rastro de playa, pero son de una belleza increible y con un poco de ganas y buenas botas puedes recorrer roca a roca la cala hasta que los acantilados te impidan seguir.
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4 comentarios:
Hola Juan, hace tiempo que sigo tu blog, interesantisimo, y con buenos detalles de la moda de la isla (en la entrada de "pruebas de cargo"), en fin, te felicito y si no te importa me gustaria contar con tu ventana en mi blog, me permito el lujo de colocar tu link, si no lo crees conveniente, me lo haces saber. Respecto a la entrada comentarte de que a pesar de lo tortuoso del camino, la recompensa de llegar al final bien vale la pena, y la vuelta se hace más liviana con el recuerdo de las imagenes que quedan grabadas en la retina. Es un rincón que enamora....
Felicidades por tu blog y un fuerte abrazo.
Jordi
esta es la cala de las que conozco en la isla que mas veces he visitado , subia desde sta eularia des riu en bicicleta por santa gertrudis y san mateo y al fondo del valle a la izquierda ascendia hasta iniciar el descenso , la recompensa un dia sosegado de sol , buceo , fruta y lectura, rara vez me cruce por alli con mas de dos o tres personas en la bulliciosa isla y no siempre ni en verano ni en invierno , algun barco eso si encontre fondeado disfrutando de su cobijo a los vientos de levante, lebeche , la suerte es que dependiendo de los vientos puedes marchar a un lado o a otro en la peninsula no tienes esa opcion . saludos.
Me alegra ver que sigues poniendo el corazón en tus fotos...!!!
Un besazo.
Juan, ha acertado Salondesol.
Tus fotos tienen este sello tan tuyo de una gran sensibilidad.
La primera es tan bonita con la roca iluminada alli en medio.
Le da algo mágico.
Un abrazo
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