No creo que sea un problema racista, ni clasista, creo más bien que es el eterno problema del reino animal, la lucha por el territorio, no solo por especies diferentes sino por elementos de la misma familia. Éstas libélulas se enfrentan porque las dos quieren la misma rama.
1 comentario:
El filósofo Sami Nair, de origen argelino y experto en emigración, nos dice: "el inmigrante, una vez integrado se vuelve intolerante hacia los extranjeros e inmigrantes que llegan posteriormente"
Es cuestión de “territorialidad”.
Somos animales, evolucionados pero animales. Levamos troquelados en nuestros genes encargados de la supervivencia el instinto de la defensa de nuestro territorio, como cualquier otro animal, incluidas tus libélulas.
Beni
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