27 de octubre de 2007

PALOMA DE LA PAZ


¡Qué delito cometí!, rezaba aquel poema. La paloma me miraba con ojos de no entender nada. Me han nombrado –me decía- símbolo de la paz y me tienen entre rejas, los humanos sois increíbles. Intenté consolarla con eso de que “desgracia de muchos…”, y le decía que no hay ni ha habido un ser humano que se haya atrevido a alzar la voz por la paz sin que le hayan apaleado desde algún lado, moral o físicamente. La historia de la humanidad se escribe con fechas de batallas y conquistas, nunca con besos y abrazos. ¡Qué ridículo para un militar conquistar con la razón!, ¡Qué vergüenza para un descubridor comprobar que el salvaje descubierto sea más inteligente y culto que él!
El mundo civilizado cuando ha salido de sus fronteras a colonizar, culturizar, convertir,…, la ha cagado, sólo ha esclavizado, desenraizado, engañado, robado, aniquilado,…-le dije-, ¿Y tú te crees el cuento ese de que eres la paloma de la paz?

3 comentarios:

Anónimo dijo...

La PAZ es muy fácil de conseguir.
Sólo tienes que agachar la cabeza, callar y hacer lo que te manden, o morirte y ya tienes paz y rosas blancas de la Sra. Barden.

Lo difícil, estriba en querer ser LIBRE, tener libertad de conciencia y de expresión.
Eso ya es un problema, es pedir demasiado, algo que un gobierno de izquierdas no puede consentir de ninguna manera.
Ahi tienes a tu paloma, pacificamente entre rejas.


Paz tenemos toda la que quieras, hasta hartarnos.
Hasta tenemos un ejército pacificando en Afganistán o en el Líbano pacificando mano a mano con los pacíficos chicos de Hezbola.

Beni

Anónimo dijo...

Ya se que aquí no se viene a discutir de política, pero ¿He leido mal o arriba pone que un gobierno de izquierdas no puede permitir la libertad?, ah claro un gobierno de derechas "clama por la libertad", no me acordaba...
Desgraciadamente los humanos somos así, Juan. Pero si tan solo podemos conseguir nuestro pedacito de libertad ya conseguimos mucho y, además, animamos a otros a hacerlo.
Un abrazo.

Anónimo dijo...

Los que militamos alguna vez en organizaciones sociales, no lo haciamos por la paz.
Paz Franco nos daba hasta hartarnos.
Buscábamos, libertad y justicia.

Que es lo que diferencia al hombre libre del esclvo.

Y durante todo este tiempo, no sólo no he visto nada que me haga cambiar de opinión.
Todo lo contrario, reafirmarme en ella.

Beni