13 de octubre de 2007

A PROPÓSITO DEL SER


Como es sábado y se me acabó el contrato de trabajo estoy dándole vueltas, como al cubo de Kubric que por cierto nunca he solucionado, a un cubo más inconcreto, el cubo vacío del concepto de existencia. Me pregunto si soy (somos) un conglomerado de genes + experiencia de tiempo vivido + destino marcado + muerte asegurada, o solo soy lo que soy en el momento exacto en que me lo estoy preguntando, segundos más tarde ya soy otro. O tal vez seamos pura química emotiva continuamente cambiante. O porqué no solamente seamos lo que nos queda por vivir, el pasado se muere en el mismo momento en que el tiempo trascurre y somos una continua creación de nosotros mismos, con memoria y recuerdos a los que podemos recurrir, pero nunca para SER sino para recordar lo que FUIMOS y poder seguir SIENDO en cada momento.
Mañana es domingo pero me da igual, ahora tendré seis meses de domingos.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Algo de esto, comentaba yo con mi perra, hace poco.

Me decía mi perra Diva, toda una experta en la Teoría de Sistemas, que las cosas no ocurren por algo, sino para algo. Y el que no sepamos para que, no significa que ello carezca de finalidad.

Ella tiene claro que la especie humana ha evolucionado a partir de una ardilla que evoluciono a primate que se irguió y desarrollo la memoria deductiva, la percepción de si mismo y del entorno, con el fin de poder coger el coche e ir a Carrefour a por los sacos de su pienso y llenarla el bol del agua.

Yo comparto su teoría y creo que con el tiempo, los humanos evolucionaremos y llegaremos a ser como ella.

Beni.

Anónimo dijo...

A mí me han contado los niños que se es ahora y aquí y para que ese SER no se disloque demasiado van enmarañándose recuerdos muy lejanos que se asientan en la memoria con la paciencia de los sedimentos concienzudos, bien meditados y elegidos, que no van a marcharse jamás para corroborar que lo que se está siendo es lo que tiene que ser ¿o lo que tiene el ser? (ahí me perdí), sin que lo inmediatamente anterior pueda herirlos ni confundir su esencia.