6 de julio de 2006

GORI


Gori, nuestro más tenaz jazzero ha sido atacado a pedradas por la Intifada camionera.
No es la gota que colma el vaso, es una señal divina, dice él, para pensar en abandonar la isla. Uno más, ya he oído y sabido de otros que están pensando en hacer las maletas.
No puedo ni quiero reprochárselo, él es otro amante (somos más de lo que parece) de la isla que percibe cómo se le escapa de las manos el poder hacer algo, y peor aún siente que se le escapa de la mente. Los que amamos a Ibiza hace tiempo que nos estamos “escondiendo”, pero es que estar “a la vista” es insoportable. Asomamos la cabeza en invierno cuando sentimos la isla más nuestra, pero cada vez menos lugares tienen vida.
Aún así, no te vayas Gori, aunque ellos se apropien del cuerpo de Ibiza y lo malvendan o prostituyan, nosotros somos el alma y no la venderemos al diablo a cambio de la vida eterna, nos moriremos cuando toque pero no exiliados de Ibiza.
La riqueza pasa, lo material desaparece, pero los espíritus vuelven, sino a pedir factura vendrán a recuperar lo que les pertenece. Tal vez yo sea un ciego soñador y la realidad es que Ibiza nunca será la misma, lo sé, ni será ni posiblemente deba serlo, pero aspiro a una isla sin un bloque más, sin un metro de asfalto más, sin un coche más, sin muchas cosas más, y poco a poco romper con esa falsa imagen de isla frívola y desmadrada donde todo tiene cabida y todo está permitido a cambio del miserable dinero.
La roca que rompió la luna de tu coche y te hirió no te avisaba para que te marches de Ibiza, sólo significa que no se debe mover una piedra más de su sitio, que se paren las canteras, que se paren los camiones, que se paren las construcciones aberrantes.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

No os rindáis ni Gori ni tú, ni otros amantes de Ibiza, sois la última esperanza que tiene la isla de que otros se enamoren a través de tus fotos o su música. Ibiza adolece de más enamorados.
Un beso.

Mariano Planells dijo...

UN saludo a Gori, házselo llegar, Juan. Juan tengo un proyecto para tí, como siempre mucho trabajo y ni un duro. Buena profesión hemos escogido.

Anónimo dijo...

Cariñito, dile a Gori que también hay personas que estiman enormemente la huella que él deja en Ibiza...si se va, nuestra islita maltratado se quedará huérfana de melodía

Anónimo dijo...

La primera vez que fui a Ibiza tuve la suerte de conocer a gente de allí maravillosa. Vi más allá de lo que la gente ve de ibiza, que sólo ven la droga, perdición y descontrol.
Tiene lugares increíbles que te dejan sin habla, tardes apasionantes, noches divertidas, estar entre montañas con sus paisajes y que de repente aparezca a lo lejos el mar, sentarte en una cala solitaria, simplemente a pensar, mirar la puesta del sol y observar como cada persona, que esta mirando lo mismo que tu, tiene diferentes maneras de ver la vida o de disfrutarla, la diversidad de pensamiento pero que todos en la isla caben, mayores, niños adultos, "locos adolescentes"... todos tienen su lugar, pero cuidarla parece que esta envejeciendo con el trato que le estan dando y no quiero que desaparezca...

Juan Sotomayor dijo...

Soy Juan de Córdoba conocí a gori en el 83 ánimo buena gente de Ibiza